Desde el Hogar de Nazaret, institución perteneciente a Cáritas Mar del Plata que brinda ayuda a las personas en situación de calle, aseguraron que se están repartiendo más de 270 viandas por noche, cuando el pico registrado hasta el momento había sido de 240.
Aún no terminó el verano, pero las bajas temperaturas ya se hicieron sentir en Mar del Plata. El cambio climático también se refleja en la cantidad de personas que solicitan ropa, alojamiento y comida a diferentes organizaciones no gubernamentales de la ciudad, dato que preocupa a sus autoridades.
Durante el invierno de 2016, según los datos relevados por LA CAPITAL el pasado noviembre, siete personas perdieron la vida en situación de calle en un periodo invernal al que calificaron de “largo y duro”.
Si bien la época más fría del año aún no comenzó, el director del Hogar de Nazaret, una institución perteneciente a Cáritas Mar del Plata que alberga a un promedio de 60 hombres y mujeres, señaló, con preocupación, la difícil situación que ya se percibe la entidad.
Articulando su trabajo con la iniciativa eclesiástica de la Noche de la Caridad, que funciona desde diciembre de 2001 repartiendo viandas calientes durante las madrugadas en la ciudad, el Hogar de Nazaret reconoce un “importante” aumento en la demanda alimentaria.
“En el pico más alto de la asistencia, dábamos 240 viandas por noche y el dato de la semana pasada es que se repartieron 277. Es decir, que la demanda es mayor y con un fenómeno particular: ya no sólo viene gente en situación de calle, sino también familias que no tienen el dinero para comer y vienen a recibir la asistencia de la Noche de la Caridad, aún teniendo donde dormir”, señaló.
Según dijo, actualmente se encuentran trabajando “a la capacidad máxima”, ya que, aseguró, “somos el único lugar de Mar del Plata, digan lo que digan, que está abierto los 365 días del año”.
Comenzó el Operativo de Invierno
Desde este jueves se dio inicio a un nuevo programa municipal para asistir a personas en situación de calle. Según aseguró a LA CAPITAL la secretaria de Desarrollo Social, Vilma Baragiola, el mismo contará con un equipo de operadores y se extenderá hasta octubre, entre las 0 y las 6 de la mañana.
“La posibilidad de que un equipo de operadores recorra las madrugadas de Mar del Plata, contactando a aquellos que estén viviendo en la calle y que quizás no aceptan ir a paradores, va a servir para poder evaluarlos, conversar con ellos, acercarles algo caliente”, señaló.
Indicó, a su vez, que las personas que forman parte del equipo pertenecen a la planta de ‘El puente’, grupo que atiende y trabaja en el parador ‘El Campito’ y ‘Punta Mogotes’.
Consultada sobre si existirá un fortalecimiento de las medidas de prevención, aseguró que “la intención es que este año, a partir de mayo, nosotros tengamos abierto un nuevo lugar para que gente en situación de calle tenga dónde cobijarse durante las noches de Mar del Plata, más otros lugares que hay que dependen de organizaciones no gubernamentales y de la iglesia”, indicó sin brindar más precisiones.
Esto fue puesto en duda por Benzo, quien sostuvo que “en el año que pasó, la política de la Municipalidad fue un hotel que se consiguió por un buen samaritano, fue una situación excepcional. De no haber existido ese hotel, las personas que se alojaron allí hubiesen estado en situación de calle”. Y siguió: “A la luz de la experiencia de años anteriores y, en el año que pasó, con las mismas personas a cargo, me permito expresar mis reservas respecto de la efectividad y cumplimiento de los anuncios. Será muy importante el seguimiento de los medios de comunicación y de la comunidad toda para verificar que se haga lo que se anuncia”.
“De pobreza a pobreza estructural”
Un informe de la Universidad Católica Argentina reveló que, desde fines de 2015, se sumaron 1,5 millones de nuevos pobres en el país, mientras que, por otro lado, los últimos números del Indec volvieron a posicionar a Mar del Plata en el triste podio de la desocupación.
Al respecto, la secretaria de Desarrollo Social indicó: “Lo que he notado y me alarma muchísimo es la pobreza estructural que hemos heredado en la ciudad de Mar del Plata. La gestión del intendente Arroyo ha encontrado una situación social donde se pasó de tener pobreza a pobreza estructural, la cual está representada cuando te encontrás en barrios de la ciudad con familias que viven prácticamente con paredes de cartón y de nylon”.
Aprovechó, a su vez, para disparar contra la anterior gestión al sostener que “eso no existía en Mar del Plata”, algo que, aseguró, “lamenta ya que, en estos últimos 8 y 10 años, la ciudad si algo recibió fue dinero para ser aplicado a la cuestión social”.
Benzo: “La Municipalidad pretende trasladar a Cáritas las consecuencias de su mora y su incumplimiento”
La fuerte polémica que se inició el año pasado, tras la muerte de siete personas en situación de calle, se vio acrecentada cuando, en diciembre, el director del Hogar de Nazaret, Roberto Benzo, hizo pública la deuda que la comuna mantenía con la institución, una de las principales en dar asistencia a aquellas personas que no tienen donde dormir.
Al día de hoy, sólo se pagaron 120 mil pesos de los 960 mil que adeuda el municipio y, vale aclarar, que aún restan sumar a ese monto los tres periodos faltantes de 2017, los cuales aún no se encuentran actualizados por inflación.
Según estos cálculos, el faltante ascendería a más de un millón de pesos, algo que dificulta la actividad de la institución.
Por la prestación de sus servicios, la entidad recibe una ayuda económica de la comuna reconocida por la ordenanza 19531. La misma no había sido otorgada por la gestión de Cambiemos “ni una sola vez” desde asumida la administración del municipio.
Tras reiterados reclamos, un nuevo acuerdo y el primer desembolso llegó este febrero, aunque con nuevas complicaciones a la hora de realizar la rendición, lo que volvió a frenar el cobro acordado.
Nuevo acuerdo
A través de una nota oficial con fecha del 22 de diciembre de 2016, la Municipalidad expresaba la imposibilidad de poder solventar el subsidio de 90 mil pesos mensuales que estipulaba el Convenio Marco de Coordinación y Cooperación de la ordenanza vigente, y bajaba la propuesta a 80 mil, algo que el directorio del Hogar aceptó.
A raíz de ello, el 9 de febrero, el intendente, junto a las autoridades del área de Hacienda, firmó un decreto que autorizaba la entrega en concepto de subsidio un monto de 960 mil pesos, a abonarse en 9 cuotas, siendo la primera de 120 mil y las restantes de 105 mil cada una.
De todas maneras, al tiempo de hacer la rendición, la Municipalidad les informó que los comprobantes a presentar debían pertenecer al período posterior al día 9 de febrero de 2017, fecha del decreto en cuestión.
Según Benzo, ese impedimento administrativo hace suponer que la Municipalidad tiene “intención de no pagar realmente el año 2016 ya que no aceptar comprobantes de ese año”. Además – señaló – de acuerdo a la secuencia prevista en el texto del decreto, los pagos del año anterior finalizarían en el mes de octubre o noviembre del corriente año”, utilizando así todos los comprobantes de 2017, lo que significaría “volver al punto de partida” cuando se desee cobrar 2017.
Aseguró entonces que, con esta dificultad, la comuna “pretende trasladar a Cáritas las consecuencias de su mora y su incumplimiento”.
Baragiola: “Estamos resolviendo la situación”
La secretaria de Desarrollo Social, Vilma Baragiola, aseguró a LA CAPITAL la voluntad del municipio de regularizar la deuda con la entidad.
“Desde que asumimos empezamos a trabajar en la posibilidad de que las deudas se vayan saldando. Es así que, durante 2016, el 21 de septiembre específicamente, se saldó la deuda que había quedado con Cáritas por parte de la gestión anterior, que no lo había pagado ni un peso del año 2015”, indicó, pese a que Bonzo aseguró que “jamás habíamos asistido a una situación de morosidad similar por parte de la Municipalidad de General Pueyrredon”.
Sobre el problema administrativo que se encuentra dificultando la rendición del Hogar, la funcionaria señaló que “se detectó que había que agregar un dato al trámite administrativo para que se pudiera seguir cobrando, por lo que ahora estamos resolviendo esa situación para que ellos, de acá a agosto, puedan terminar de cobrar el convenio del año pasado y arrancar, rápidamente, encarar lo que es 2017”.